El proyecto PPV II apunta a añadir, en tres años, al menos 2.400 toneladas (t) de carne de pez a la actual oferta nacional del producto (15.000 t) a través de apoyo técnico y soluciones financieras innovadoras que prometen desarrollar la piscicultura familiar y el consumo de pescado en Bolivia.
Peces Para la Vida (PPV) es un proyecto impulsado por una plataforma institucional inclusiva conformada hoy por 26 organizaciones nacionales y extranjeras públicas y privadas que buscan crear en Bolivia un entorno favorable que posibilite el desarrollo sostenible de sectores emergentes como la pesca y la acuicultura.
La primera fase del proyecto (2012-2014) se enfocó en la investigación, pero también trabajó en la optimización de la cadena productiva del paiche —uno de los peces de agua dulce más grandes del mundo— en el norte amazónico y en el fortalecimiento de la piscicultura en Yapacaní (Santa Cruz), donde en tres años los acuicultores multiplicaron su producción por ocho y sus ingresos por cinco.
La segunda fase, “de desarrollo”, busca “contribuir al alivio de la pobreza y fortalecer la seguridad alimentaria especialmente de mujeres y familias indígenas” a través de la expansión de la acuicultura familiar de pequeña escala y del manejo de las pesquerías del paiche, pez que puede alcanzar entre 3 y 4 metros de largo y pesar más de 200 kilos, explicó Rodrigo Daza, coordinador del PPV II, quien destacó el potencial para la pesca y acuicultura que tiene el país.
“Mientras que en Europa hay 300 especies comerciales de peces, Bolivia tiene en su cuenca amazónica aproximadamente 1.000 especies de peces, de las que 600 se pueden explotar para su consumo”, afirmó la coordinadora del Área de Gestión y Relaciones Interinstitucionales del instituto Faunagua, Roxana Salas, quien sostuvo que pese a su riqueza en especies acuícolas, el país aún exporta grandes cantidades del alimento.
En Bolivia, la oferta total de carnes de pescado es de 15.200 t, de las que al menos el 33,5% (5.100 t) proviene de la importación (3.000 t de sábalo argentino, 2.000 t de trucha peruana y 100 t de pacú brasileño).
“Queremos activar la pesca y la acuicultura. El presupuesto de este proyecto contempla un capital de arranque de 200.000 dólares canadienses ($us 163.360) para financiar a los productores”, expresó Luis Badani, director de la consultora especializada en temas productivos IMG.
El PPV I identificó que en el país hay 60.402 hectáreas de lagunas donde hay paiche y que en cada hectárea de laguna hay 2,19 ejemplares adultos de más de 1,5 metros y 56 kilos, lo que hace un total de 7.306 t de carne, de las que se puede extraer de forma sostenible el 30% (2.323 t), expuso Julio Alem, director de Proyectos del Cidre, institución financiera de desarrollo que se incorporó al PPV II para potenciar el sector.
En la actualidad, agregó, el sistema financiero otorgó solamente $us 4,4 millones a actividades de pesca y acuicultura. “Implementaremos una estrategia para colocar $us 2 millones más en el sector, el 50% de lo que prestaron las 63 entidades financieras”.
Solo con este aporte, se prevé incrementar la producción sostenible de paiche de 400 a 800 t y la de pacú de 800 a 1.600 t, es decir, de 1.200 a 2.400 t hasta 2018.
“La idea es mostrar que se puede invertir en el rubro para que otras financieras se inserten en esta dinámica”, aseveró Badani.
Alem subrayó que solo las 1.200 t adicionales de carne de pescado que actualmente se podrían explotar tienen un valor próximo a los $us 4 millones, el 27,5% de los $us 14,5 millones que se importaron en carne y conservas de pescado en 2014.
Proceso. “El consumo de carne de pescado ha aumentado en los últimos años en el país, pero lo que queremos es que haya un incremento en el consumo de la carne de pescado de origen nacional”, dijo el ejecutivo del Cidre, quien detalló que el plan propone un incremento del 300% en el consumo hasta 2018, lo que implica 400.000 nuevos consumidores.
El PPV II se implementará en el norte amazónico —una de las regiones más pobres del país, pero la que provee casi el 50% de la oferta nacional de pescado— e incluirá a 1 municipio del Beni, 3 de Santa Cruz y 5 de Cochabamba, además de 3 territorios indígenas y 1 área protegida.
El proyecto, que aplicará modelos productivos adaptados al contexto local amazónico, no solo ofrecerá oportunidades para mejorar la calidad de vida de las familias de los productores, sus ingresos y su alimentación, sino que los apoyará con asistencia técnica e investigación.
Los especialistas del PPV informaron que ya comenzaron a trabajar en el fortalecimiento organizacional, de sistemas de transporte y de preservación, en la apertura de mercados, en la capacitación de recursos humanos y en la coordinación con los actores gubernamentales.
Naturaleza del plan
El PPV ofrece equidad de género, participación comunitaria, sostenibilidad del medio ambiente e integración de la investigación y el desarrollo.
Buscan subir el consumo de pescado de 2 a 6 kg
El Gobierno busca triplicar el consumo per cápita de pescado de 2 a 6 kilos (kg) hasta 2020 a través de créditos y transferencias que forman parte de la estrategia de fortalecimiento de la pesca y acuicultura en Bolivia, informó la directora de la Institución Pública Desconcentrada de Pesca y Acuicultura, Carmen Monasterios.
“Queremos triplicar este bajo consumo anual de 2 kilos por persona en promedio, llegar a 5,7 a 6 kilos de carne de pescado de aquí a cinco años, para ello tenemos que producir más y bajar los costos de producción. Hoy, producir 1 kilo de pescado cuesta Bs 15”.
La FAO recomienda consumir 12 kilos de pescado por año, 4,8 kilos menos que el consumo per cápita promedio de este alimento en el mundo en 2014 (15,8 kg).
El director de Proyectos del Cidre, Julio Alem, detalló que con 2 kilos de alimento balanceado se produce 1 kilo de carne de pollo, mientras que con 1,3 kilos del mismo alimento se produce 1 kilo de carne de pescado, más saludable y nutritiva, ya que contiene sobre todo proteínas que favorecen el crecimiento y buen desarrollo del organismo, así como zinc, fósforo, vitaminas A y B12, y ácido fólico.
El Gobierno establecerá ‘cadena fría’ de transporte
El Gobierno anunciará en los próximos días un plan para fortalecer el transporte de carne de pescado desde puntos alejados del país a través de camiones frigoríficos y cámaras fijas frías que permitirán a los pequeños acuicultores incrementar su producción y comercializarla en los centros urbanos del país.
“Muy pronto, la ministra (de Desarrollo Rural y Tierras, Nemesia Achacollo) va a informar dónde van a estar implementados estos camiones frigoríficos y las cámaras fijas que servirán de apoyo durante estos dos años de trabajo en el proyecto grande de industrialización del pescado en Bolivia”, comunicó la directora de la estatal Institución Pública Desconcentrada de Pesca y Acuicultura (IPD-Pacu), Carmen Monasterios.
Este plan responde a la necesidad de reducir los altos costos del transporte por aire.
De acuerdo con datos del Ministerio de Desarrollo Rural, Bolivia proyecta incrementar la producción de pescado de 5.000 a 20.000 toneladas con tres complejos piscícolas, los cuales podrían instalarse con apoyo técnico del Gobierno de Brasil. El objetivo es triplicar el consumo de pescado.
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