Piscicultores de Cochabamba se encuentran en aprietos debido a que el 30 por ciento de su producción no tiene mercado.
Ante la pérdida que representa esta situación y la falta de un hábito de consumo en la población, el sector analiza opciones como la exportación de la carne al Paraguay.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) el consumo promedio anual de pescado por persona debería ser de 12 kilos al año. En Bolivia el promedio oscila entre 2 y 3 kilos al año.
Para marcar la diferencia con relación a otras carnes, la producción de pesca comercial es de 7 mil toneladas al año y la de pollo supera las 400 mil toneladas, según datos proporcionados por la Unidad de Limnología y Recursos Acuáticos de la Universidad Mayor de San Simón (UMSS).
Se estima que el 60 por ciento del pescado que se consume en Bolivia proviene de países vecinos en productos enlatados.
Por otro lado, establece que la falta de hábito no es solo en el consumo, sino en el preparado de la carne.
LA SITUACIÓN En Cochabamba, la situación de los productores en el Trópico es crítica, ya que desde hace dos años realizaron importantes inversiones privadas que han permitido la producción de más de 5 mil kilos anuales, principalmente en Chimoré y Puerto Villarroel. Los mercados están en Cochabamba y Santa Cruz, pero saturados con la producción de Villa Montes y del norte de San Germán.
“De 300 kilos que sacamos, nos sobra 100 y tenemos que rematarlo”, dijo el productor Israel Barrenechea.
Frente a esta situación, hace dos meses, un grupo de psicicultores optó por probar en mercados del Paraguay.
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