jueves, 3 de abril de 2014

Frutihortalizas para alimentar el ganado

En este proceso, la calidad de los alimentos que se usan en la dieta de los animales resultará clave porque de ella y del manejo de los mismos dependerá la producción de carne (kg/animal/hectárea), la calidad de esas carnes y sobre todo, el resultado económico del Sistema Productivo. Las frutihortalizas son una nueva opción para la alimentación óptima del ganado, que le garantiza al productor una nutrición balanceada rica en minerales proteínas y de muy bajo costo. Con la ampliación de la frontera ganadera a otras regiones, las condiciones para producir carne son cada vez “más duras” por efectos del clima y de los suelos. Este escenario muestra que se debe replantear o rediscutir los sistemas ganaderos y con ello, buscar alternativas de alimentación y manejo que se adapten a esta realidad. En este marco, existe una serie de alimentos, algunos nuevos y otros no tanto, diferentes a los tradicionales forrajes frescos de calidad (pasturas, verdeos, etc.), los granos de cereal y los forrajes conservados (silajes de planta entera, henos y henolajes). Ahora más que nunca los expertos recomiendan utilizar, como se está haciendo en muchas partes del mundo, los diferentes subproductos de agroindustria y residuos de cosecha (fruti-hortícolas y rastrojos de cosecha fina y gruesa) que hay en todas las regiones del país, además, de alimentos “nuevos” como pastos naturales, malezas, especies arbóreas, etc. El veterinario Isidro Jacome, de Fegasacruz, asevera que este tipo de alimentación sería muy bien aceptada en el hato nacional, ya que actualmente sufrimos una falta de alimento y ésta sería una opción para socializarla entre los productores y aplicarla al ganado.

Los desechos de frutas y hojas como el plátano, maíz, tienen un gran potencial nutricional, en general con un buen contenido en azúcares y alta proporción de agua. Debido a ello, el ensilaje es el mejor método para conservarlos. Para asegurar una adecuada fermentación es necesario, en la mayoría de los casos, mezclar estos residuos con alguna fuente correctora (fibrosa –tipo pajas- o rica en azúcares –tipo granos, melaza, etc.-. De esta forma se mejora la calidad y la condición del ensilado.

Frutihortalizas que alimentan

Es alimento en base a desechos de frutas y hortalizas que aún luego de deteriorarse no pierden sus nutrientes y ayudan al engorde y producción lechera del ganado vacuno. Esta es una opción al alcance de las manos y a bajo costo.

Pulpa de tomate

Puesto que el tomate se procesa durante el verano y tiene un alto contenido en agua, si se deja a la intemperie se deteriora rápidamente y se llena de mohos.

Torta de prensado de aceitunas

La torta del prensado -residuo que contiene el hueso y la pulpa- se obtiene al finalizar la extracción del aceite. Su valor nutritivo es bajo, pero es útil en periodos de escasez de forraje, debido a su alto contenido de aceite si la torta permanece a la intemperie se deteriora rápidamente. El consumo de la torta disminuye en función del período de almacenamiento.

Raíces

Entre los cultivos que tienen raíces aptas para ensilar, se destacan la yuca entre otros.

Subproducto de la yuca

Tanto la raíz como las hojas se usan como forraje para el ganado lechero y de carne. Las raíces frescas o secadas al sol sirven de forraje en diversas formas, cortadas en tajadas, trituradas o molidas, y substituyen en muchos países a los granos de cereales. Las raíces de yuca son una fuente de energía, ya que son ricas en carbohidratos solubles y almidón, que es un importante ingrediente de la ración y un buen aporte energético para la microflora del rumen; sin embargo, su contenido en proteína es bajo. Por su parte, las hojas de yuca es un alimento rico en proteínas y muy valioso para los rumiantes. Las hojas solas o la planta completa se deben triturar y luego se las ensila solas o mezcladas con alimentos ricos en energía como residuos de plátano, raíces u orujo. Este ensilaje es un alimento bastante equilibrado para las vacas lecheras. Sin lugar a dudas hay una verdadera “artillería” de alimentos alternativos, algunos pocos conocidos, que pueden ayudar a afrontar los desafíos que la ganadería tiene por delante. Es necesario profundizar mucho en las aptitudes, para producir carne o leche, de diferentes subproductos de residuos de cosecha, forrajes naturales y evaluar el impacto productivo y económico sobre los sistemas ganaderos.

Subproductos del plátano

En la mayoría de las fincas del trópico húmedo se cultiva el plátano y su fruta se emplea como alimento familiar cotidiano. Los residuos de su cosecha y los subproductos son de gran importancia para la alimentación de rumiantes.

Residuos cítricos

En general, los residuos de la industria de jugos tienen un nivel bajo de materia seca (13 al 18% MS), de proteína, calcio y fósforo. En cambio, tienen muy buena digestibilidad (75 al 90%) y concentración energética (2,6 a 3,4 Mcal Energía Metabolizable/kg. MS), aportado por un alto contenido de azúcares solubles y ricos en fibra muy digestible –11 al 12%-.

Orujo de uva

Después del prensado de 100 kg de uvas queda un residuo de 5 a 10 kg de orujo o escobajo de uva -semilla, pulpa y tallos- que tiene un contenido de 50% de materia seca –MS- y un valor nutritivo relativamente bajo. Al ensilar el orujo fresco mezclado con subproductos de alta calidad como el salvado de trigo, la pulpa de tomate u otros residuos energéticos-fibrosos, se mejora su fermentación y su almacenamiento y se obtiene un ensilaje bien conservado y apetecible.

No hay comentarios:

Publicar un comentario