P. ¿Cómo se siente asumir el puesto en un tiempo de crisis?
L.M.: Las situaciones no se escogen y uno debe estar preparado. Entendemos que estamos en un momento crítico que afecta mucho y no podemos decir que en Santa Cruz no sucede nada.
La crisis del Beni nos va a afectar porque la región se provee de ganado Nelore del Beni y habrá un bajón y vamos a tener que ver en el transcurso del tiempo qué previsiones tomaremos.
P. ¿Pero se garantiza la estabilidad de precios en la carne?
L.M.: Nosotros no tenemos nada que ver con el mercado, el que debe garantizar el precio es el municipio a través de los conductos regulares. Los productores desde hace tres años mantenemos estables los precios a los frigoríficos y hacia los centros de remates, ese tema ya lo hemos conversado con la ministra del área, la señora Nemesia Achacollo, y le hemos dicho que el sector jamás se va a aprovechar de esto.
P. ¿Qué puntos se deben tomar en cuenta para el repoblamiento ganadero en Beni?
L.M.: En el plan que firmaron los productores del Beni y el Gobierno se contemplan tres puntos.
El primero es el tema productivo, la industrialización y el tema de financiamiento.
Pero creo que lo más urgente es pensar en la reconstrucción de los predios y reconstrucción de pasturas para recibir el ganado que se va a introducir en el Beni.
Para ello es muy importante el refinanciamiento de los créditos y otros aspectos como son la Función Económica y Social (FES) que se plantee de dos a cinco años, y una flexibilización en el tema de desmonte para que a un 10 por ciento del bosque que no fue afectado por las lluvias se puedan hacer pastura y para dar mayor comodidad al ganado que ha sobrevivido en el Beni.
P. ¿Se importarán matrices?
L.M.: Sí, porque si pensamos en una repoblación total del ganado en el Beni, vamos a tener que acudir a países vecinos.
Porque la cantidad de ganado que se ha perdido es interesante y no alcanzaría con la oferta que hay en el mercado interno para poder cubrir la demanda.
P. ¿Esto va a afectar la exportación de la carne?
L.M.: En ningún momento, el año pasado hemos tenido un excedente de casi 13.000 toneladas de carne que ha quedado en los campos y eso va a venir a cubrir cualquier déficit.
Cada año tenemos cerca de mil o siete mil toneladas que quedan y al mercado externo se han exportado 2.500 toneladas de carne y no va a afectar en nada; es más, es importante mantener los mercados que tenemos porque es muy difícil conseguirlos.
Además, nunca se habló de aumentar a más de 4.000 toneladas, porque no hay la exigencia de los consumidores.
Lo que debemos pensar es en aumentar las producción de Santa Cruz, con nuevas técnicas de producción como se lo está haciendo en el tema de confinamiento.
Hay cerca de 70.000 animales que están siendo criados por confinamiento. Buscaremos la forma de ayudar a estos productores para que puedan producir más.
P. ¿Entonces se debe apuntar a este tipos de técnicas también en el Beni?
L.M.: Estamos hablando de regiones diferentes, no puedo adelantarme o pensar ¿qué va a suceder en Beni?.
Pero lo que corresponde es buscar soluciones a corto plazo, para lo que está sucediendo y de largo plazo, porque vemos que la población está creciendo y el hato no está acompañando este crecimiento. Debemos pensar en normas que nos ayuden a crecer en el tema de pasturas, tanto en Santa Cruz como en Beni, para luego pensar en aumentar el hato ganadero.
P. ¿A cuánto asciende ya las pérdidas por las lluvias?
L.M.: Las pérdidas son muy fuertes. Son 6.400 predios ganaderos que han sido afectados. Si a eso se suma la recuperación de las propiedades ganaderas, la recuperación de las pasturas y el repoblamiento ganadero, estamos hablando de sumas que van más allá de los 100 millones de dólares, no es un tema en el que nosotros como gremio digamos "los vamos a solucionar", acá se requiere de la intervención del Estado, ya hay un plan de acción y esperamos que lo pongan en marcha.
P. Cuáles son sus metas?
L.M.: Nos planteamos tres temas, el tema institucional, económico y sanitario. En el tema institucional vamos a seguir trabajando con las instituciones del Estado.
En el tema económico, seguir buscando recursos para ser gestores de proyectos para el sector y en el tema sanitario, que es lo que más nos preocupa, es poder ser un país libre de aftosa ya se han hecho todo los requisitos y tenemos conocimiento de que en el mes de mayo podemos ser un país libre, ese el objetivo mayor.
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