lunes, 6 de octubre de 2014

Programa de chinchillas cerró por falta de estudio de mercado



El programa para reproducción de chinchillas lanígeras que fue implementado por el Servicio Departamental Agropecuario de Tarija (SEDAG), no continuó por no haberse realizado un previo estudio de mercado por parte de esa institución.

La crianza de esos animales resulta una inversión considerable, pero después de la comercialización del cuero, se logra recuperar el 100 por ciento del capital invertido, y las respectivas ganancias.
La responsable de zootécnica de campo del SEDAG, Sandra Aguilar López, informó que ella se hizo cargo de dicho programa a la mitad de la ejecución. Explicó que no se realizó un estudio de mercado para poder venderlas. “Eso se tenía que hacer antes de implementar el programa porque la producción es netamente para la venta de la piel”.
Asimismo, comunicó que a un inicio esa iniciativa tenía previsto entregar las chinchillas a los beneficiarios como un alquiler. Pero que después de la reproducción se tenía que devolver las parejas otorgadas por el SEDAG.
En tal sentido, se hizo una capacitación previa a la entrega, la cual instruía sobre la manera cuidarlas, alimentarlas, y cómo se las debía criar. Entonces se distribuyeron 130 animales. Principalmente fueron favorecidas las comunidades de la zona alta de Tarija, y de manera especial la comunidad de Ñoquera.
Aguilar argumentó que se decidió distribuirlas en ese lugar porque las condiciones climáticas eran favorables para su supervivencia. Pero en Cercado también se hizo la entrega al presidente de la Asociación de Criadores de Chinchilla, Freddy Vega.
Por otro lado, informó que el programa también finalizó por diversos problemas, uno de ellos por las condiciones climáticas (no explicó los demás). Reveló que el programa concluyó el año pasado.
Hernán Tejerina se dedica a la crianza de esos animales en Potosí, y pertenece a la Asociación Nacional de Criadores de Chinchilla. Él explicó que el habitad de esa especie es la cordillera, zona que se encuentra en los cuatro y cinco mil metros sobre el nivel del mar.
Sin embargo, manifestó que se puede adecuar ambientes para la sobrevivencia de esos animales. “Tiene que ser un ambiente frio, poca luz, y no debe existir mucha aglomeración de gente. Eso porque los humanos están en contacto con otros animales, y pueden poseer bacterias que trasmitirán enfermedades a las chinchillas”.
Especificó que cada una de ellas come entre 25 a 30 gramos al día. Su dieta está basada en el consumo de alfa alfa, alimento concentrado, y avena. Cada una llega a costar 150 dólares, y el cuero fluctúa entre 40 y 60 dólares.
Reveló que actualmente, la asociación nacional exporta cuero a China, pero que antes era requerido en Croacia y Serbia. Sostuvo que son utilizadas para fabricar abrigos y tapados, los cuales llegan a costar entre 40 y 80 mil dólares en Francia.
El tamaño de la piel es aproximadamente de 15 centímetros de ancho por 20 de largo, y la disecación se debe efectuar en la sombra.
También dio a conocer que una familia de esa especie consta de siete animales, seis hembras y un macho. Y cada 111 días paren, es decir tres veces al año, cada hembra pare dos animales.
Por otro lado, Aguilar comentó que la crianza de las chinchillas es dificultosa, y que se debe tener “mucho” cuidado. Además que se tienen que tomar en cuenta el habitad de los animales, ya que el cuero es delicado, y cualquier desperfecto de la piel no permitirá su exportación.

La chinchilla se encuentra en peligro de extinción

La chinchilla es un roedor nocturno, nativo de Los Andes principalmente de Chile, Bolivia y Perú. Se caracteriza por su densa piel que es considerada la más suave del mundo, por esta razón fueron cazadas llevándolas al borde de la extinción.
En tan sólo 15 años ha desaparecido el 90 por ciento de su población; además, la escasa población actual sigue bajo la presión de la caza ilegal y de la reducción de su hábitat. Estos animales pueden vivir en cautividad alrededor de 15 - 20 años.

No hay comentarios:

Publicar un comentario