Como marca la tradición, el sábado anterior al inicio de la Expocruz, empiezan a llegar al predio ferial los ejemplares bovinos seleccionados y preparados durante años. Ayer ingresaron los primeros 100 Nelore hasta los galpones pecuarios, donde recibirán los últimos antes de participar en los juzgamientos o los 36 remates programados. El gerente general de la Asociación de Criadores de Ganado Cebuino (Asocebú), Javier Landívar, dijo que se mantiene la cantidad de ganado en exposición. Esperan mover $us 2 millones en los remates que inician desde mañana.
"Somos un poco cautos al respecto, coyunturalmente los problemas que tiene la ganadería puede repercutir en la compra de reproductores, pero, obviamente todas las cabañas están colocando a la venta todo lo mejor en su producción", destacó Landívar.
Días de arduo trabajo. Uno de los cuidantes de la cabaña Nelorí, Fidel Castro, afirmó que el trabajo duro de tener a los animales en forma empieza desde el amanecer. En una jornada común de Castro, tiene que levantarse a las 6:00 para darles de comer a los ejemplares que van a ser expuestos. Luego se los pasea para que evitar estresar al animal por estar amarrado."En alimentos es un sistema de balanceados, que es con el choclo, "entreverado" con el silo de maíz, afrecho de soya maíz molido, sal mineral y otros ingredientes", recalcó.
Asimismo, dijo que antes de darles su segunda comida al ganado, se los baña y "chaquetea" (quitarles tejido muerto del cuerpo), acotando que el trabajo es distinto entre hembras y machos porque estos últimos se lesionan los tobillos debido al peso.
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