El técnico de Codefauna de ese municipio, Nataniel Ordóñez, explicó que se reforzaron los controles en la parte alta, que es donde especialmente se realiza la pesca del surubí, dorados, y también del preciado sábalo.
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“Como unidad se empezó a realizar operativos, tanto en las noches como en las mañanas. Hacemos un control y una revisión, tanto a la gente que extrae los peces con fines comerciales y deportivos, se midió peso y talla-comentó el funcionario-. Se identificó que la concentración de esos dos tipos de pescadores, se realizan los días jueves, viernes y sábado, desde las 18.00 a 01.00 horas del siguiente día, y de las 05.00 a 10.00 horas. Se hace un control más exhaustivamente en el río, porque la misma ley nos da más rigor para hacer operativos”.
En ese sentido, Ordóñez manifestó que con esos trabajos se redujo la extracción de peces con talla y peso inferior a lo permitido por las normativas. No negó que algunas personas hayan infringido esa disposición, pero fue cantidades pequeñas, no como la gente pensaba y se empezaba a alarmar.
Las denuncias que llegaron hasta esa instancia, sobre pesca indiscriminada, incluso llegó a analizar en convocar a las Fuerzas Armadas y Policía Boliviana para recorrer el Pilcomayo dentro de la jurisdicción de Villa Montes. En caso de tener denuncias específicas sobre infracción de la ley, llegar con el Ministerio Público.
El director de Medio Ambiente y Biodiversidad de la Gobernación, Adolfo Rueda, indicó que realizaron un monitoreo del río el 23 y 24 de agosto. Es así que prevén que entre el 15 y el 20 de septiembre inicie la veda en el Pilcomayo. Todo dependerá de los resultados que arrojen las inspecciones realizadas por Villa Montes y Yacuiba.
Sobre la reducción de peces en esta gestión, señaló que se debe a la falta de cantidad de agua en el río, lo que no permitió que suban cardúmenes en grandes cantidades.
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