Armando Suárez Rojas, jefe distrital del SENASAG, informó ayer que restan escasos días para que finalice la ampliación del XVII ciclo de vacunación contra la fiebre aftosa. Los ganaderos deben tomar en cuenta este aspecto para cumplir con la inmunización de su hato y evitar sanciones.
Este ciclo oficialmente finalizó el 15 de junio, pero a pedido de las asociaciones de ganaderos de las regiones aún afectadas por desastres naturales, se alargó hasta el 30 del presente mes. Quedan 3 días más, dijo Suárez.
Terminado el tiempo establecido por el SENASAG, la vacunación se realiza de forma compulsiva y se cita, mediante notas judiciales, a los ganaderos que no cumplieron con la aplicación del biológico, para que en los 15 días siguientes lo hagan. La diferencia es que en este caso todos los gastos operativos son cubiertos por los productores, además de sancionarlos pecuniariamente, subrayó.
ALCANCES
Según reporte de los técnicos en las diferentes jurisdicciones, hasta la pasada semana, la certificación alcanza un 55 % de cobertura, pero al momento existe un gran movimiento de ganaderos que visitan las oficinas para recabar la autorización de compra de la vacuna.
Otro informe de las puestos de ventas del insumo da cuenta que en el mismo período se vendió un 60 %. Lo planificado por el SENASAG fue un 90 %.
En las provincias sucede el mismo fenómeno, los productores aceleran, en los últimos días, los trámites para vacunar sus hatos. Ellos saben que para mover ganado de un lado a otro, necesitan las guías de movimiento que se obtienen previa presentación del Certificado de Vacunación.
Por las razones anteriores y dada la importancia del proceso de erradicación de la aftosa, Suárez llamó a todos los ganaderos para que cumplan con el programa porque al final, el beneficio es para todos, porque con la certificación de la Organización Internacional de Epizootias se inicia la exportación de carne
Puntualizó que este ciclo y el XVIII son vitales para alcanzar las metas propuestas, porque a partir de allí el SENASAG enviará un informe a la OIE para que autorice la realización de una serología a nivel nacional, cuyo resultado podría derivar en la ansiada certificación de zona libre de aftosa, porque el Beni como región ya fue declarado.
Este ciclo oficialmente finalizó el 15 de junio, pero a pedido de las asociaciones de ganaderos de las regiones aún afectadas por desastres naturales, se alargó hasta el 30 del presente mes. Quedan 3 días más, dijo Suárez.
Terminado el tiempo establecido por el SENASAG, la vacunación se realiza de forma compulsiva y se cita, mediante notas judiciales, a los ganaderos que no cumplieron con la aplicación del biológico, para que en los 15 días siguientes lo hagan. La diferencia es que en este caso todos los gastos operativos son cubiertos por los productores, además de sancionarlos pecuniariamente, subrayó.
ALCANCES
Según reporte de los técnicos en las diferentes jurisdicciones, hasta la pasada semana, la certificación alcanza un 55 % de cobertura, pero al momento existe un gran movimiento de ganaderos que visitan las oficinas para recabar la autorización de compra de la vacuna.
Otro informe de las puestos de ventas del insumo da cuenta que en el mismo período se vendió un 60 %. Lo planificado por el SENASAG fue un 90 %.
En las provincias sucede el mismo fenómeno, los productores aceleran, en los últimos días, los trámites para vacunar sus hatos. Ellos saben que para mover ganado de un lado a otro, necesitan las guías de movimiento que se obtienen previa presentación del Certificado de Vacunación.
Por las razones anteriores y dada la importancia del proceso de erradicación de la aftosa, Suárez llamó a todos los ganaderos para que cumplan con el programa porque al final, el beneficio es para todos, porque con la certificación de la Organización Internacional de Epizootias se inicia la exportación de carne
Puntualizó que este ciclo y el XVIII son vitales para alcanzar las metas propuestas, porque a partir de allí el SENASAG enviará un informe a la OIE para que autorice la realización de una serología a nivel nacional, cuyo resultado podría derivar en la ansiada certificación de zona libre de aftosa, porque el Beni como región ya fue declarado.