La sequía se agudiza y afecta a gran parte del Chaco boliviano.
Con una estimación de más de 8.000 reses muertas y aproximadamente unas 1.550 que agonizan, el Chaco tarijeño, cruceño y chuquisaqueño pide la inmediata declaratoria de desastre en ese territorio, con el objetivo de lograr ayuda internacional y evitar un mal mayor.
Mientras que el auxilio gubernamental no llega a la zona, apenas unos cuantos camiones cisternas acuden con agua de las prefecturas a las propiedades ganaderas.
EL DEBER fue testigo el martes y miércoles del drama que viven los productores de esa región. Un equipo periodístico recorrió las comunidades de Ayururenda, Colonia del Sur, Bagual, Brecha 40, Puesto Encañada, Montecristo, La María y Puesto Seco, de la primera sección del Gran Chaco (Yacuiba), y constató que cientos de vacas murieron, mientras que otras se encuentran agonizando.
Hay desesperación en los rostros de los dueños de los predios, pues no tienen forraje ni agua para seguir alimentando a su ganado.
Por ejemplo, en Puesto Encañada, de Marcelo Saldías, más de una decena de bovinos se murieron en las últimas dos semanas. Similar situación se registra en los predios de Juan Portales, Nazario Palacios y Martín Alarcón, a quienes ayer comenzó a distribuirse 30.000 litros de agua que apenas alcanzan para unos cinco días. Cada uno de estos predios tiene alrededor de 400 vacas.
La situación se complica en la propiedad La María, del ganadero Santiago Leaños, pues ocho vacas murieron en los últimos días y una decena se encuentra en riesgo porque los atajados no tienen agua y el forraje alcanzará hasta el domingo. A unos kilómetros más adelante, Emiliano Arriaga testimonió que se le murieron 30 vacas y una veintena agoniza.
En la zona de Montecristo, de propiedad de Arturo Ferrari, si bien la situación se torna un poco mejor, empero hay preocupación porque la ayuda gubernamental demora.
Lo contrario ocurre en Puesto Seco, donde se encontró a Rosalva Pando y a sus hijas Alejandra y Natalia reanimando a sus animales. En el área se perdieron cuatro vacas hace tres días, pese a que los camiones cisterna del gobierno departamental de Tarija asisten dos veces a la semana.
En el otro lado, en la provincia O'Connor, localidad Entre Ríos, el alcalde Teodoro Suruguay, indicó que 1.500 cabezas murieron y ya no hay agua ni forraje; es más, comienza a faltar agua para el consumo humano. En esta área se requieren retroexcavadoras, forraje y motobombas.
Sobre el particular, el alcalde de Yacuiba, César Brú, expresó que de las 65.000 cabezas que tiene la región, un 80% está en riesgo de mortandad. "En 2007, el presidente Evo Morales regaló siete camiones cisterna a las organizaciones sociales, pero no aparecen".
Finalmente el oficial mayor del gobierno municipal de Villa Montes, Fernando Rojas, exteriorizó su preocupación porque 3.000 vacas languidecieron en los últimos tres meses y se registraron además cinco focos de incendio.
Reacciones
Emiliano Arriaga
Mueren vacas y terneros
"Se han muerto 30 vacas y unos ocho terneros. Tratamos de reanimar a los animales (bovinos) que nos quedan, pero éstos ya no se pueden levantar por falta de agua. Está llegando ayuda de la Prefectura de Tarija, pero es insuficiente. Cada tres días viene un camión cisterna con unos 30.000 litros de agua y tenemos que medir el líquido para las 440 vacas que tenemos".
Rosalva Pando
Preferimos hacer charque
"Las vacas se están muriendo rápidamente; esto es como una plaga. Ya no tenemos agua para los animales y los atajados están secos. Hace poco llovió, pero fue sólo algunos minutos y no alivió en nada a los animales. Lo peor es que la carne apenas se la puede vender y todavía a bajo precio, por lo que preferimos hacer charque".
Ermas Pérez
Tiene que haber más ayuda
"Los atajados se han secado y el forraje se ha perdido. Nosotros pedimos por lo menos cuatro camiones cisterna para la localidad de Caraparí y, gracias al Gobierno, se nos ha entregado. Pero tiene que haber más ayuda y es necesario el auxilio internacional para encarar entre todos el problema, pues está en riesgo la seguridad alimentaria de la región”.
Mientras que el auxilio gubernamental no llega a la zona, apenas unos cuantos camiones cisternas acuden con agua de las prefecturas a las propiedades ganaderas.
EL DEBER fue testigo el martes y miércoles del drama que viven los productores de esa región. Un equipo periodístico recorrió las comunidades de Ayururenda, Colonia del Sur, Bagual, Brecha 40, Puesto Encañada, Montecristo, La María y Puesto Seco, de la primera sección del Gran Chaco (Yacuiba), y constató que cientos de vacas murieron, mientras que otras se encuentran agonizando.
Hay desesperación en los rostros de los dueños de los predios, pues no tienen forraje ni agua para seguir alimentando a su ganado.
Por ejemplo, en Puesto Encañada, de Marcelo Saldías, más de una decena de bovinos se murieron en las últimas dos semanas. Similar situación se registra en los predios de Juan Portales, Nazario Palacios y Martín Alarcón, a quienes ayer comenzó a distribuirse 30.000 litros de agua que apenas alcanzan para unos cinco días. Cada uno de estos predios tiene alrededor de 400 vacas.
La situación se complica en la propiedad La María, del ganadero Santiago Leaños, pues ocho vacas murieron en los últimos días y una decena se encuentra en riesgo porque los atajados no tienen agua y el forraje alcanzará hasta el domingo. A unos kilómetros más adelante, Emiliano Arriaga testimonió que se le murieron 30 vacas y una veintena agoniza.
En la zona de Montecristo, de propiedad de Arturo Ferrari, si bien la situación se torna un poco mejor, empero hay preocupación porque la ayuda gubernamental demora.
Lo contrario ocurre en Puesto Seco, donde se encontró a Rosalva Pando y a sus hijas Alejandra y Natalia reanimando a sus animales. En el área se perdieron cuatro vacas hace tres días, pese a que los camiones cisterna del gobierno departamental de Tarija asisten dos veces a la semana.
En el otro lado, en la provincia O'Connor, localidad Entre Ríos, el alcalde Teodoro Suruguay, indicó que 1.500 cabezas murieron y ya no hay agua ni forraje; es más, comienza a faltar agua para el consumo humano. En esta área se requieren retroexcavadoras, forraje y motobombas.
Sobre el particular, el alcalde de Yacuiba, César Brú, expresó que de las 65.000 cabezas que tiene la región, un 80% está en riesgo de mortandad. "En 2007, el presidente Evo Morales regaló siete camiones cisterna a las organizaciones sociales, pero no aparecen".
Finalmente el oficial mayor del gobierno municipal de Villa Montes, Fernando Rojas, exteriorizó su preocupación porque 3.000 vacas languidecieron en los últimos tres meses y se registraron además cinco focos de incendio.
Reacciones
Emiliano Arriaga
Mueren vacas y terneros
"Se han muerto 30 vacas y unos ocho terneros. Tratamos de reanimar a los animales (bovinos) que nos quedan, pero éstos ya no se pueden levantar por falta de agua. Está llegando ayuda de la Prefectura de Tarija, pero es insuficiente. Cada tres días viene un camión cisterna con unos 30.000 litros de agua y tenemos que medir el líquido para las 440 vacas que tenemos".
Rosalva Pando
Preferimos hacer charque
"Las vacas se están muriendo rápidamente; esto es como una plaga. Ya no tenemos agua para los animales y los atajados están secos. Hace poco llovió, pero fue sólo algunos minutos y no alivió en nada a los animales. Lo peor es que la carne apenas se la puede vender y todavía a bajo precio, por lo que preferimos hacer charque".
Ermas Pérez
Tiene que haber más ayuda
"Los atajados se han secado y el forraje se ha perdido. Nosotros pedimos por lo menos cuatro camiones cisterna para la localidad de Caraparí y, gracias al Gobierno, se nos ha entregado. Pero tiene que haber más ayuda y es necesario el auxilio internacional para encarar entre todos el problema, pues está en riesgo la seguridad alimentaria de la región”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario