Carniceros protestan por la falta de provisión, mientras los ganaderos aseguran que diariamente faenan 1.500 cabezas diarias de ganado.
Los carniceros de La Paz marcharon ayer por las principales calles de la sede de Gobierno, en protesta porque desde el pasado fin de semana no pueden adquirir la producción que proviene principalmente del Oriente del país y que es la más demandada por los consumidores paceños. Esto debido a que el Servicio de Impuestos Nacionales (SIN) procedió a clausurar por lo menos seis empresas frigoríficas, porque asegura que no cuentan con el Número de Identificación Tributaria (NIT) y, por tanto, no emiten factura, pese a que diariamente comercializan 30 cabezas de ganado, que representa 180 mil bolivianos.
"No hay carne de res", dijo el dirigente de los carniceros de La Paz, José Luis Ramos, cuando encabezaba la movilización junto a sus afiliados. Asegura que el problema podría empezar a sentirse en los próximos días, debido a que algunos de sus afiliados todavía tienen algo de producto almacenado, que servirá para cubrir la demanda de los paceños.
Según el Gobierno, casi el 50 por ciento de la carne de res que consumen en La Paz y El Alto, es provistas por los mataderos que operan en las dos ciudades y el restante llega en forma de carne, principalmente de Santa Cruz y Beni.
EL SIN EXPLICA EL PORQUÉ DE LAS CLAUSURAS. El presidente del SIN, Érick Ariñez, informó, en conferencia de prensa, que se clausuraron en las cercanías del aeropuerto internacional de El Alto seis frigoríficos de carne de res y tres en la ciudad de Cochabamba, debido a que no contaban con su respectivo NIT, pese a que comercializan montos diarios por encima de los 37 mil bolivianos, que es la categoría que les corresponde a quienes están en el Régimen Simplificado y por tanto no emiten factura.
Ariñez aclaró que los operativos no están dirigidos a las carnicerías de barrio, ni de los mercados o lugares donde se vende carne de res o de pollo al detalle, por lo que convocó a éstos comercializadores a sostener un diálogo y convocó a los internadores de carne de res a registrarse en el Padrón de Contribuyentes lo antes posible, para continuar con sus actividades económicas y facturar por toda venta realizada.
El dirigente de los internadores de carne, Wilson Zelada, dijo que "dejarán de llegar a La Paz entre 30 mil y 35 mil kilos de carne del oriente, porque los internadores hemos paralizado nuestras actividades. No es que busquemos desabastecer a la ciudad, sino que no tenemos la garantía para traer y vender la carne, porque Impuestos está clausurando los puntos de venta que tenemos". Tanto este sector como los carniceros de La Paz, piden que se emita una norma que regule este tipo de actividades, que se había acordado mediante un convenio en 2013.
LA EMPRESA DE APOYO A PRODUCCIÓN DE ALIMENTOS (EMAPA) ASEGURA QUE SI SURGE LA NECESIDAD, SE ENCARGARÍAN DE COMERCIALIZAR LA CARNE DE RES. El gerente de Emapa, Avelino Flores, espera que el conflicto se solucione, aunque alertó que cuentan con una cámara fría para comercializar el producto, "si hubiera la necesidad, nosotros vamos a trabajar para abastecer. Podríamos activar cualquier mecanismo para comercializar el producto". Según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) de la gestión 2013, en Bolivia había más de un millón de cabezas de ganado bovino que se faenaban y casi 222 toneladas de carne que se lograban producir, siendo el departamento de Santa Cruz la que cuenta con con la mayor cantidad de producción.
30 cabezas de ganado, que provienen de Santa Cruz y del Beni, son comercializadas diariamente.
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