Según el reporte de la Federación de Ganaderos del Chaco, en esa región anualmente mueren más de 5 mil cabezas de ganado vacuno por efectos de la sequía y otros fenómenos naturales.
A pesar de las fuertes lluvias registradas en el país entre los meses de enero y marzo, la región del Chaco soporta sequías que ponen en serios problemas a los ganaderos de esa región que demandan al Gobierno nacional y a las instituciones estatales como la Gobernación del departamento, ayuda para la construcción de atajados y construcción de retenes de agua para el consumo de los animales.
“Todo es producto de la sequia que cada año nos afecta, si bien las instituciones públicas intentan realizar programas son paliativos que no ponen una solución concreta al problema”, afirmó el representantes de FegaChaco, Javier Cuellar.
Explicó que FegaChaco agrupa a más de 1.000 ganaderos de la provincia Gran Chaco y que las pérdidas anuales por la muerte de sus reces bordean el millón y medio de bolivianos, además de afectar la economía de la región.
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