martes, 27 de abril de 2010

En Chuquisaca y Tarija claman por ayuda inmediata

Productores ganaderos de Tarija y Chuquisaca pidieron a sus municipios que realicen las gestiones ante las prefecturas de sus departamentos para declarar zona de desastre y emergencia por la sequía que azota el Chaco boliviano. Temen que lo peor se sienta a partir de junio.
Según Rubén Navia, presidente de los ganaderos de Macharetí (Chuquisaca), un 60% de los productores están en fase crítica por falta de agua. “Si no llueve en menos de un mes, la situación se complicará más”, refirió.
Navia dijo que tampoco hay asistencia de la Prefectura. El sábado tendrán una asamblea en la que discutirán la no vacunación contra la aftosa, en animales flacos y débiles, pues prevén que pueden morir. Asimismo, decidirán acciones de hecho contra las autoridades de Chuquisaca por su presunta dejadez.
Por su parte, la alcaldesa de Macharetí, Estela Durán, manifestó que los agricultores han perdido sembradíos de maíz y soya, y a los ganaderos se les secaron los pastizales.
Javier Cuéllar, dirigente ganadero del municipio de Villa Montes (Tarija), dijo que están a la espera de que las autoridades ediles declaren la emergencia municipal, así como las departamentales atiendan con prontitud todos los problemas que está ocasionando la sequía.
Cuéllar señaló que la escasa lluvia que llegó al Chaco no cubrió todas las partes, especialmente a la frontera con Paraguay. Añadió que un diputado oficialista le comunicó que una comisión gubernamental arribará el 3 de mayo para hacer una evaluación de los daños por la sequía. La subprefecta de la provincia Cordillera, María Silvia Terceros, afirmó que la pérdida del 80% de la producción agrícola producirá escasez de alimentos. Sin embargo, dijo que con las organizaciones internacionales Visión Mundial y el Programa Mundial de Alimentos atenderán parte de las necesidades en dos meses más. Además, agregó que se contratará 18 camiones cisterna.

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